La escasez de agua en el municipio de Vélez, Santander, está afectando su economía, pues la producción de bocadillo, considerado como una riqueza gastronómica, se ve amenazada.
Según lo manifestó el alcalde Orlando Ariza Ariza al medio El Frente, varias fábricas han tenido que suspender sus labores, y otras han evidenciado la disminución en su producción, por lo que varios de sus colaboradores se encuentran preocupados ante la posibilidad de perder sus empleos.
“En este momento, tenemos en riesgo más de 500 empleos directos, formales y permanentes, generados por las fábricas de bocadillo. Esto resulta en grandes pérdidas económicas no solo para los empresarios, sino también para la economía del municipio”, señaló Ariza al medio mencionado.
Ariza agregó que, “estamos pasando una situación crítica, es un problema de todos los años. Estamos con unos racionamientos, pero cada vez escasea más el agua”.
Ahora, el emblemático dulce está en riesgo, pues el suministro de agua debe priorizarse en el hospital, la cárcel, el asilo San José y la escuela de carabineros han sido categorizados.
De esta manera, el municipio procura garantizar el abastecimiento de agua potable por medio de carrotanques de los bomberos municipales y departamentales. Asimismo, ya se empezaron a implementar medidas de racionamiento, como la prohibición de lavar carros y andenes.
FUENTE QUINDIONOTICIAS.COM