Durante su reciente visita a Armenia (Quindío), el ministro de Justicia y Derecho, Néstor Iván Osuna, compartió los detalles de la reforma a la justicia, enfocada en agilizar los procedimientos judiciales y mejorar la eficiencia del sistema colombiano.
Una de las principales propuestas de la reforma es la reducción de audiencias y otras mejoras en el Código de Procedimiento Penal, sin afectar el Código Penal, que se centra en aspectos como condenas y sentencias. Osuna destacó la importancia de una justicia más ágil y efectiva, señalando la posibilidad de acuerdos de negociación y compensación para las víctimas.
Uno de los puntos débiles identificados en el sistema actual es la falta de agilidad en los procesos, con la Fiscalía enfrentando tres (3) millones de investigaciones en curso sin evacuar. El Ministro advirtió sobre la gran congestión en el poder judicial, donde un solo juez de control de garantías o de conocimiento puede tener más de 200 procesos, lo que contribuye a la dilación de los casos y, en última instancia, a la impunidad.
“El dato de los tres (3) millones lo dijo la fiscal general Luz Adriana Camargo- en la primera ocasión que nos reunimos, tres (3) millones de investigaciones abiertas, ella me dio datos que a ella la preocupan, tres (3) millones de investigaciones abiertas ahí avanzando o no avanzando.”, resaltó el ministro
Por otra parte, Osuna informó sobre la recepción de 13 colombianos extraditados desde Ecuador, destacando los esfuerzos del gobierno para garantizar la cooperación internacional en la lucha contra el crimen. Por esto, anunció la próxima revisión del pabellón anexo en la cárcel Peñas Blancas de Calarcá, Quindío, como parte de los esfuerzos para mejorar las condiciones.
El ministro Osuna resaltó a su vez, los planes del gobierno para unir el Uspec y el Inpec, dos entidades encargadas de la administración penitenciaria y carcelaria. Esta medida busca optimizar los recursos y mejorar la coordinación en el sistema.
En la lucha contra las extorsiones en las cárceles, el Ministro explicó la estrategia “Dominó”, que incluye la identificación y reubicación de los agentes extorsionadores, controles de ingreso de celulares a las cárceles y la desactivación de tarjetas SIM. Esta estrategia se basa en aprendizajes de México.
Finalemente, Néstor Osuna, hizo hincapié en la importancia de emplear a personas privadas de la libertad y ofrecer beneficios fiscales a los empresarios que los contraten. Esta iniciativa busca promover la reinserción social de los internos y contribuir a su reintegración en la sociedad.