Aunque hubo una leve mejoría de cara a 2023, el hambre persiste con fuerza en zonas rurales y departamentos como La Guajira, Sucre y Córdoba.
En Colombia, 14,4 millones de personas enfrentan actualmente inseguridad alimentaria moderada o grave, según el más reciente informe del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), presentado en conjunto con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). La cifra equivale al 27,6% de la población nacional.
Aunque el dato representa una reducción de 0,8 puntos porcentuales frente a 2023 (167.000 personas menos), las autoridades advirtieron que la problemática sigue siendo alarmante, especialmente en los centros poblados y zonas rurales dispersas, donde la prevalencia aumentó de 31,2% a 34,2% en el último año.
“La pobreza, la falta de ingresos estables, el conflicto armado y el aumento en los precios de los alimentos son las principales causas de esta crisis”, explicó Piedad Urdinola, directora del DANE, quien también alertó sobre el incremento en el número de personas con inseguridad alimentaria grave, que pasó de 2,6 a 2,7 millones, a pesar de que el porcentaje (5,2%) se mantuvo estable.
Departamentos con mayor afectación
El estudio revela que los territorios con mayor prevalencia de inseguridad alimentaria moderada o grave en 2024 fueron:
-La Guajira: 52,4%
-Sucre: 49,5%
-Córdoba: 47,6%
En contraste, los departamentos con menores niveles de afectación fueron Caldas (12,8%), Bogotá DC (13,9%) y Santander (16,2%).
Factores que agravan la inseguridad alimentaria
La condición socioeconómica y demográfica influye significativamente en los niveles de inseguridad alimentaria. El informe destaca que:
-Hogares con jefatura femenina registran una prevalencia del 28,2%, frente al 23,1% en hogares con jefatura masculina.
-En hogares encabezados por personas sin educación formal, el indicador alcanza un alarmante 47,4%.
Entre quienes se perciben como pobres, el 46,1% reporta inseguridad alimentaria, mientras que entre quienes no se consideran pobres el porcentaje es de solo 11,6%.
Para las personas afiliadas al régimen subsidiado de salud, la prevalencia es del 37,2%, en comparación con el 12,8% del régimen contributivo.
Además, los hogares en condiciones de déficit habitacional tienen una prevalencia del 40,4%, el doble que aquellos con vivienda en buenas condiciones (19,5%).
Una herramienta clave para combatir el hambre.
Agustín Zimmermann, representante de la FAO en Colombia, señaló que estos resultados, obtenidos mediante la Escala FIES, son fundamentales para medir los avances del país frente al cumplimiento del Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) 2: Hambre Cero, y para diseñar políticas públicas basadas en evidencia.
“La inseguridad alimentaria no es solo un indicador de carencia alimentaria, sino también de desigualdad estructural. La reducción de apenas 0,8 puntos porcentuales en un año refleja que la crisis persiste, y requiere respuestas urgentes y focalizadas”, concluyó Urdinola.
Fuente: Quindío Noticias