
La muerte de Jesús Santrich, que fue confirmada por las disidencias de las FARC a través de un portal web que les pertenece, abrió la discusión sobre la operación de este grupo armado en la frontera colombo-venezolana.
Aun cuando verificar la muerte del líder guerrillero podría tomar tiempo, pues son varias las hipótesis, ahora diferentes líderes políticos y algunas oenegés han insistido en enfocar la atención sobre Luciano Marín, alias Iván Márquez, quien sigue siendo la cabeza más importante de las disidencias de las FARC, tras renunciar a los Acuerdos de Paz que se firmaron en 2016.
En los últimos meses se han revelado informaciones sobre la forma en que Márquez y otros disidentes llevan el negocio del narcotráfico entre Colombia y Venezuela, utilizando pistas clandestinas del país vecino para llevar los estupefacientes hacia países centroamericanos.
En los últimos meses, las informaciones de inteligencia y de actores políticos venezolanos ubican a Márquez en el estado Apure, en la frontera con Arauca, lugar en donde además habría tenido que enfrentar ataques armados, con otros grupos criminales y, presuntamente, con la Fuerza Armada Bolivariana.
La ONG venezolana FundaRedes, confirmó a través de su director, Javier Tarazona, la muerte de Santrich. Pero además, Tarazona sigue manejando la tesis de que Iván Márquez sigue en el estado Apure, en la zona conocida como Río Caribe. De esta zona habría salido en días anteriores Santrich, hacia el estado Zulia, tras los enfrentamientos armados. En este mismo punto, Márquez habría recibido a alias Romaña la semana anterior, luego de un ataque por parte de alias Ferley González.