A partir de hoy martes 1 de abril, los 152 peajes administrados por la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) y el Instituto Nacional de Vías (Invías) tendrán un incremento del 1,86 % en sus tarifas. Este ajuste corresponde al último tramo de los aumentos escalonados fijados por el Gobierno Nacional para nivelar las tarifas tras la congelación aplicada en 2023.
Con este aumento, se completa el 9,28 % correspondiente a la inflación del 2023, después de los incrementos previos del 2,78 % el 1 de enero y del 5,2 % el 16 de enero de este año. Según el Ministerio de Transporte, esta estrategia de ajustes graduales busca mitigar el impacto en los costos de transporte y garantizar la sostenibilidad de los proyectos viales, después del déficit de $500.000 millones generado por el congelamiento de tarifas.
El ministro de Hacienda, Germán Ávila, indicó que la medida ha sido diseñada para afectar lo menos posible al transporte de carga, priorizando un impacto mayor en vehículos de gama alta con motor diésel.
Peajes más costosos tras el ajuste
Tras la aplicación del incremento, los peajes más costosos en el país serán:
- Pipiral (Vía al Llano): $26.893
- Túnel de Oriente (Medellín-Rionegro): $25.000
- Guaico (Risaralda): $24.107
- Aburrá (Antioquia): $23.300
- Circasia (Autopistas del Café): $21.643
Otros peajes con tarifas elevadas incluyen Cisneros ($21.600), Palmitas ($20.198), Boquerón I y II ($19.249), El Korán ($18.964) y Puerto Triunfo ($17.464).
Excepción en algunos peajes
El Ministerio de Transporte también informó que ocho peajes tendrán suspendidos sus cobros contractuales por seis meses. Estos son:
- Fusca, Andes y Unisabana (Autopista Norte)
- El Placer (vía Rumichaca – Pasto)
- Cisneros (Antioquia)
- Carmen de Bolívar (Puerta del Hierro)
- Autopista al Mar (noroccidente antioqueño)
- Transversal Siga-Machetá (Boyacá)
Sin embargo, a partir de mayo, los peajes de Unisabana, Fusca y Andes comenzarán a aplicar la nueva tarifa, seguidos en julio por Carmen de Bolívar, Machetá, El Placer, Aburrá y Cisneros.
El presidente de la Cámara Colombiana de la Infraestructura (CCI), Juan Martín Caicedo, expresó su preocupación por el impacto de la suspensión de aumentos en la estabilidad de los proyectos de concesión. “La viabilidad de estas iniciativas está estrechamente vinculada a los ajustes contractuales y a la estabilidad en la generación de recursos”, indicó.
A pesar de las críticas, el Gobierno Nacional defiende los ajustes como una medida necesaria para garantizar el financiamiento de obras de infraestructura vial, el mantenimiento de las carreteras y la seguridad vial en el país.
Fuente: Quindío Noticias
